Mezcla

Además de tener un buen balance de frecuencias y volúmenes, hay otros aspectos importantes que debemos tener en cuenta al preparar nuestro track para masterizar. Uno de ellos es la eliminación de ruidos y zumbidos no deseados, lo que puede hacerse a través de la eliminación de las frecuencias no deseadas utilizando un filtro pasa-bajos, por ejemplo.

También es importante asegurarse de que los niveles de los diferentes elementos del track están adecuadamente balanceados. Esto implica prestar atención a la dinámica y el nivel de cada pista individualmente, y ajustar los niveles y la compresión para que se complementen entre sí.

Otro aspecto a considerar es el uso de efectos de sonido. A menudo, se agregan efectos como reverberación o delay para mejorar la profundidad y la amplitud del sonido, y pueden ser importantes para crear una sensación de espacio y cohesión en el track. Sin embargo, es importante no exagerar con el uso de efectos, ya que puede resultar en un sonido excesivamente procesado y poco natural.

Finalmente, la fase de masterización es el momento adecuado para aplicar algunos efectos globales, como la ecualización y la compresión, para que el track tenga una cohesión sonora y una presencia en la mezcla final. Una vez que se hayan aplicado estos ajustes, se puede realizar una prueba de audición y asegurarse de que el track suena bien en una variedad de sistemas de reproducción antes de su lanzamiento.